domingo, 16 de noviembre de 2008

DAR AL BARRO LA PROPIA VIDA


Varios cientos de personas se dieron cita anoche para rendir homenaje a Paco Tito, el alfarero que ha elevado la cerámica ubetense a la categoría de arte y que con su trabajo ha paseado el nombre de Úbeda por medio mundo. Entre aplausos y abrazos, muchos abrazos, de esos que sólo saben dar los buenos amigos, se conmemoraron sus 65 años como alfarero. Porque en el caso de Paco Tito (22 de diciembre de 1943) cada año de vida cuenta como un año de oficio. Ambas cosas, vida y oficio, en él han ido siempre de la mano y se han enriquecido juntas de experiencia, de sabiduría.Así, ayer no sólo se rindió homenaje a Paco Tito. También se reconoció a Francisco Martínez Villacañas. Porque, conforme iba creciendo la persona en cuerpo y espíritu, crecía también el alfarero en su arte y dominio de una disciplina artesanal noble y arraigada a la tierra, como la materia prima que utiliza para dar forma a su obra.Teniendo todo esto en cuenta, no es extraño que Paco, siempre que intenta visualizar sus más lejanos recuerdos, se vea con un pegote de barro en la mano. «Todo el rato estaba modelando, haciendo esculturillas que utilizaba como juguetes», comenta con la mirada perdida antes de enfocarla nuevamente a un punto concreto de su alfar por el que se cruza en ese momento, correteando, uno de sus cuatro nietos, Tito, viendo como sus recuerdos parecen cobrar vida. Sin duda, se ve reflejado en él, y más aún si le ve las manos manchadas de arcilla, y es a él a quien ahora hace esos juguetes.Sobre su juventud, la recuerda sentado en la rueda (o el torno), incluso antes de llegar a darle patadas (en ese momento no había motores eléctricos y se la hacía girar con la fuerza de una pierna). «Cuando consigas hacer una cantarilla del apero, todo lo demás vendrá sólo», le repetían sus mayores. Y efectivamente fue así. Y a esa cantarilla le siguieron miles de cacharros (así le gusta llamar a las piezas que entonces eran de uso cotidiano y hoy son cotizados objetos de decoración).El hecho es que, mirando hacia atrás, se siente satisfecho de muchas cosas. En lo humano, por supuesto, de su familia y del capital que ha reunido en amigos. Y en lo material, de todo lo logrado profesionalmente. Aunque reconoce que cuando ve algunas obras pasadas no puede evitar analizarlas con la mirada del presente y pensar que se podían haber hecho mejor, por otro lado dice estar seguro que en el momento en que las realizó puso todo su esmero y conocimiento.En toda su trayectoria existe un punto de inflexión, un momento que da un giro de tuerca más a su prolífica obra: el día en que se le ocurrió modelar un Quijote. Aunque de joven ya había dado forma a alguno, dada su fascinación por la obra de Cervantes, siempre fue consciente de que había que tratar al personaje con dignidad. El momento llegó, y su colección de esculturas en miniatura con diferentes escenas de la vida novelesca del hidalgo caballero le abrió decenas de puertas, le hizo viajar más que nunca, le dio grandes satisfacciones y le recompensó con el elogio generalizado del público.Efectivamente, entonces se confirmó lo que venía sucediendo desde hacía tiempo, y es que llegó el momento en el que Paco Tito dedicaba ya más tiempo al modelado que a los cacharros.Así, entre escultura y cacharro, entre nuevos retos y proyectos, tuvieron que pasar algunos años más hasta que vio cumplido otro sueño: tener su propio museo con piezas suyas. Se trata del Museo de Alfarería Paco Tito ‘Memoria de lo Cotidiano, inscrito en el registro de museos de la Junta de Andalucía y en el que recopila, entre otras muchas cosas, reproducciones de las piezas tradicionales de la alfarería ubetense. Y todo ello enfocado de una forma muy didáctica.Pese a todo lo logrado, le queda mucho por hacer. «Me faltará vida para dársela al barro, no lo dudes; me jubilaré un momento antes de morirme». Y con estas palabras, Paco se queda sólo mientras oye a su hijo Pablo, abajo, trabajar en el torno, y vuelve a ver a su nieto Tito correteando. Pero esta vez su mirada está clavada en la escultura que realizó a su padre, Pablo Tito, el origen de la saga, y se reconoce hasta en la postura, sentado en su silla de enea. Y mientras lo observa sonríe porque sabe que, esté donde esté, debe estar satisfecho. Igual que él lo estará, más pronto que tarde, cuando su nieto consiga hacer su primera cantarilla del apero.

HOMENAJE A PACO TITO

Con motivo del homenaje a mi padre, Paco Tito, celebrado ayer día 15 de noviembre, se han recibido infinidad de muestras de cariño y apoyo y numeros artículos publicados y recibidos para su publicación en el libro que se ha editado para este acontecimiento. Con tal motivo se me ha ocurrido que para comentar el acto voy a ir publicando las fotos que vaya recibiendo durante estos dias y al mismo tiempo publicaré los artículos que aparecen en el libro y algunos artículos aparecidos en prensa.
Para inaugurar esta sección he elegido el artículo que ha publicado hoy el Diario IDEAL, cuyo autor es mi buen amigo Alberto Román "Petos". El motivo de eligir este artículo no se debe solamente a la amistad que tengo con el autor, si no porque me parece que tiene un sentimiento muy especial. Espero vuestras opiniones.

viernes, 7 de noviembre de 2008

25 AÑOS DE ALFARERÍA 65 COMO ALFARERO



El alfarero ubetense Paco Tito recibirá un homenaje con motivo de sus 65 años
El acto tiene por título “Paco Tito 25 años de alfarería, 65 como alfarero”

Este año también se conmemoran los 25 años en funcionamiento de su taller de la calle Valencia
Se ha previsto un acto público en el Teatro Ideal Cinema y una cena en el Parador Nacional de Turismo

El conocido alfarero y escultor ubetense Francisco Martínez Villacañas, Paco Tito, recibirá un homenaje el próximo día 15 de noviembre con motivo de su jubilación. Concretamente, se ha previsto un acto que tendrá lugar en el Teatro Ideal Cinema de Úbeda a partir de las ocho de la tarde, y una posterior cena en el Parador Nacional de Turismo.
La iniciativa ha surgido de la Asociación de Amigos del Museo de Alfarería Paco Tito, que preside José Antonio Baena, y que lleva cerca de un año programándolo todo con sumo cuidado para que no llegara a oídos del homenajeado.
A lo largo de su dilatada trayectoria han sobrado momentos y motivos para reconocer la labor del prestigioso artesano, que ha paseado su obra y el nombre de Úbeda por medio mundo. Pero se ha elegido el 15 de noviembre de este 2008 por situarse entre dos importantes fechas para el ubetense. Por un lado, el pasado 9 de octubre se cumplieron 25 años en funcionamiento de la alfarería de Paco Tito, un cuarto de siglo de su taller situado en la típicamente alfarera calle Valencia. Y por otro lado, el próximo 22 de diciembre, Francisco Martínez Villacañas cumplirá 65 años de edad, o lo que es lo mismo en su caso, 65 años como alfarero.
En el acto que acogerá el Teatro Ideal Cinema, se han previsto diferentes intervenciones ensalzando la figura y trayectoria de Paco Tito, así como la entrega de distintos obsequios, y se espera alguna que otra sorpresa. Pero nada se ha desvelado aún, pues la intención de la organización es que el homenajeado no sepa con antelación lo que ocurrirá.
Con respecto a la posterior cena, sí se ha sabido que las cerca de doscientas invitaciones disponibles han sido ya retiradas, por lo que se mostrará completa. Estará abarrotada de representantes de administraciones, instituciones y colectivos de todo tipo aunque, en definitiva, se tratará de amigos y seres queridos que Paco Tito ha sabido cultivar con su trato sencillo y amable, y que le acompañarán en esta velada tan especial. Además, no se descartan nuevas sorpresas entre plato y plato.
Asimismo, durante la noche se presentará un libro conmemorativo editado para la ocasión, y que incluye textos que han escrito para este día numerosos amigos. Igualmente, en su páginas muestra abundante material gráfico de la vida y trayectoria del alfarero.
Trayectoria
Francisco Martínez Villacañas, hijo del popular alfarero Tito, nació en Úbeda un 22 de diciembre de 1943. Acompañado por su hijo Pablo Tito, se ha convertido en un exponente de la cerámica ubedí, que mantiene las técnicas de cocción del alfar árabe. En 1972 obtuvo el Premio Nacional de Diseño y Realización Cerámica, y en el año 1973 se proclamó campeón regional y posteriormente nacional de Destreza en el Oficio de Alfarería.
Ha sido merecedor de numerosos premios y su obra esta presente en diversos museos nacionales, así como en colecciones privadas tales como la de la Casa Real, El Vaticano o el Parlamento Andaluz. Y de la misma forma, es autor de distintos monumentos. Es de gran valor artístico su colección de esculturas conocidas como ‘Los Quijotes de Paco Tito’, las cuales han recorrido decenas de salas de exposiciones del país.
Su taller de la calle Valencia alberga también el Museo de Alfarería Paco Tito Memoria de lo Cotidiano, inscrito en el registro de museos de la Junta de Andalucía, en el cual se pueden apreciar reproducciones de las piezas tradicionales de la alfarería ubetense, recopiladas durante su extensa carrera como alfarero.
El Museo de Alfarería Paco Tito Memoria de lo Cotidiano, tiene la peculiaridad de ser un museo viviente, ya que en él se puede visitar la exposición y, al mismo, tiempo tener la oportunidad de contemplar a padre e hijo trabajar en el obrador centenario y disfrutar de sus explicaciones.